fue una
de las primeras mujeres en posicionarse en las esferas más altas de la política
mexicana. Su larga trayectoria la ha convertido en una de las voces más
influyentes al interior de su partido, el PRI, y en el Senado de la República.
Fue la segunda mujer en la historia de México en tener el cargo de gobernadora.
Hoy quiere ser presidenta. Ella se define como innovadora, pero su partido, el
más antiguo que existe, enfrenta desde hace años una grave crisis de
credibilidad difícil de superar.